Documento redactado por el General der Panzertruppe Georg-Hans Reinhardt, comandante del Panzergruppe 3, a comienzos de Noviembre de 1941 motivado por las enormes dificultades a las que se enfrentaban las divisiones rápidas subordinadas a su grupo acorazado en el barrizal en el que se había convertido el sector del Heeresgruppe Mitte.

06.11.1941

Der Befehlshaber der Panzergruppe 3

Ia Nr.1654/41






Las dificultades a las que actualmente se enfrentan todas las tropas rápidas son grandes y dificiles. El lento abastecimiento se suma a estas dificultades y las agudiza.

Soy consciente de todas estas dificultades y así se lo he comunicado a mis superiores. Me he atrevido incluso a cuestionar si el invierno ruso no descarta totalmente el empleo de las tropas rápidas.

Aún y así y mientras la situación general exija la prosecución de las operaciones de las tropas rápidas tenemos que hacer todo lo posible para lograr superar estas dificultades, tambien a costa del material, y cumplir con nuestras obligaciones independientemente de las consecuencias y desventajas que pudieran suponer para el equipo.

Tengo la impresión que algunos puestos se concentran demasiado en los problemas, se quejan demasiado y no siempre intentan encontrar soluciones. Es posible que detrás de la acentuación de las dificultades se esconda el deseo de la tropa de regresar a la patria.

El transcurso de la guerra hasta ahora nos ha mimado y ha impedido que pudieramos reconocer claramente las dificultades de la campaña rusa. Los dos primeros años de guerra han sido más faciles pues tras cortas y rápidas operaciones la tropa antes del invierno ha podido ser trasladada a la patria, con todas las ventajas que esto supone para el refresco, reparaciones y el bienestar personal. Ahora nos acercamos a las duras experiencias vividas en la guerra mundial, donde no se conocían las interrupciones de las operaciones durante el invierno.

Reclamo a todas las dependencias subordinadas que trabajen en este sentido y que no toleren que en ningún lugar se baje la cabeza. Para el soldado no existen tareas imposibles siempre que busque soluciones con todo su corazón.




Firmado: Reinhardt